Páginas

domingo, 16 de octubre de 2016

érase (R)



De Guridi, texto e ilustración. Ed. Tres Tigres Tristes. Sevilla.

                Todo cuento narrado oralmente debe empezar por “Érase una vez…”, de ahí que érase sea la palabra puerta, la que nos introduce en cada nueva historia y nos permite completar, acariciar, ensayar, acompañar, aventurar… nuestras vidas con las de tantísimos otros personajes. Por eso esa palabra se merecía un homenaje y Guridi se tira a esa difícil piscina haciendo un bellísimo ejercicio de natación sincronizada (ilustración y texto), de la que sale victorioso, por hacer tanta poesía  con solo las palabras justas, los trazos en azul y los fondos blanco o crema.



                Pura artesanía literaria para con tan pocos mimbres confeccionar un lujoso cesto en el que acurrucarnos a escuchar las historias contadas de esos narradores a los que Guridi dedica el libro con auténtico agradecimiento y reconocimiento. Viene a subrayar aquella antigua canción, aquellos versos, que decían. “Si se calla el cantor, calla la vida”.




                Y es que es así, como él lo recoge en  este libro: la voz envolvente de Érase (personificado en el narrador de relatos que encontramos en la cubierta)  levanta a los personajes del suelo, los desconecta de la prosaica realidad para invitarlos a un viaje que termina siendo adictivo. Tanto es así que cuando Érase deja de hablar cunde el pánico entre los habitantes y solo la otra manifestación del arte a través del sonido (además de la palabra), es decir la música, saca a Érase del silencio para volver a contar y contar y contar…




                Un libro que emociona y que nos trasmite el placer de escuchar mientras leemos, así es capaz de rizar el rizo el autor, como se “rizan” las palabras de Érase en sus oyentes; o como desaparece todo lo orgánico, lo vivo, cuando solo hay silencio; o cómo hace de “fin” una palabra para por fin volver a comenzar a hablar.




                Aquí no hay nada improvisado, a todo se le debe de haber dado muchas vueltas. Por ello no es nada accidental o resultado de la suerte, que <<la Tate Publishing, la editorial de la mismísima Tate Gallery, ha comprado (por primera vez un título español) los derechos de "Érase".>> (Sacado del Facebook del autor).




                Hay una entrevista con Guridi en la web "Un periodista en el bolsillo", que merece la pena leer.


sábado, 8 de octubre de 2016

IV Premios Plastilina & Bloggers al mejor Álbum Ilustrado

La librería Plastilina, en Cádiz a un paso de la "plaza del Balneario" (la Glorieta Ingeniero La Cierva, donde daba la vuelta el autobús del Balneario), había sido para mí un establecimiento de material escolar y prensa donde se dejaba caer la venta de algún libro. Del tipo de la que había frente a la "residencia" Puerta del Mar.



Pero un día me dijeron que iba a estar Guridi presentando un libro. Y me acerqué a verlo y verla. Sorpresa, una vez superado el largo mostrador y los estantes de las revistas y periódicos, te encuentras algo más parecido a una pequeña biblioteca que a una librería. Y por supuesto nada de una papelería. 



La madera es acogedora, los libros enseñan unos lomos llenos de color pero siempre hay también alguno de cara. Todo está lleno de ilustración en la parte baja de los dos niveles que la conforman. Es la zona infantil y juvenil y hay hasta un espacio para que los pequeños se sienten a leer.


En el segundo nivel, una vez superados los tres escalones y ya envueltos en madera del todo, están los libros para adultos con tres paredes llenas y dos mesas abarrotadas. Un ancho pasillo entre todo esto en forma de T es lo que queda para moverse.


Sin embargo este espacio crece como solo lo hacen los espacios mágicos, y se convierte en un escenario donde puede ocurrir de todo: un taller, un teatro de marionetas, una sala de presentación de libros, el hogar de los cuentacuentos.


Hay algo que me parece estupendo y es que la librería forma un "duo" con una juguetería en el local de al lado, de los mismos propietarios. Eso que me llamó tanto la atención en Argentina: en todas las librerías infantiles vendían juguetes o, lo que es lo mismo, en toda juguetería vendían libros.

Este concepto que, afortunadamente ya lo he visto en otras de mis librerías favoritas, me parece fundamental para que los pequeños y jóvenes lectores asocien la lectura al mismo placer que les produzca el juego.


Entre todo esto que es el contexto, aparece el librero que es el que firma un interesante texto: el de una librería muy viva. Entrar en su facebook nos servirá para estar al tanto puntualmente de sus numerosas actividades.

Y ahora mismo, invita a todos los amantes de los álbumes ilustrados a elegir el mejor libro del 2015 en los "IV Premios Plastilina & Bloggers al mejor Álbum Ilustrado". Para saber todo sobre ellos y participar, solo hay que acercarse a su blog.



Estamos todos invitados.