sábado, 16 de marzo de 2019

Érase una vez un bosque mágico


De Chris Riddell texto e ilustraciones. Álbum ilustrado de gran formato. Editorial Edelvives. Zaragoza.


A Chris Riddell ya lo conocemos bien en este blog porque le dedicamos una jugosa entrada.


Ahora traemos este álbum que tiene una buena parte de homenaje a los cuentos clásicos, una buena parte de ironía y crítica a los mismos, bastante humor y mucho, mucho arte. Ya lo muestra en las guardas con una galería de cuadros con personajes famosos de cuentos. La estructura es la del cuento fantástico tradicional, con una protagonista que sale de casa, cruza un espacio (más o menos peligroso) con una tarea, llega a un destino y cumple esa tarea. 


La protagonista se sitúa como respuesta inteligente a la ingenuidad de Caperucita Roja. Este carácter alternativo aparece además al optar por el color verde y a justificar la presencia de la caperuza  con la lluvia, es decir, no es una caperuza que lleve una capa pegada sino (lógicamente) una capa con caperuza. De ahí su nombre de pila “Capa de Llluvia Verde”. 


Y también, algo que abunda en lo alternativo con respecto a Roja es su equipaje: si va a emprender un viaje cruzando un bosque, ha de ir bien equipada por lo que lleva un bastón de senderismo, unas botas “gruesas y cómodas”, unos calcetines limpios para cambiarse y tres objetos más:
-un libro, con lo que nos la presenta como espabilada, lista;
-una invitación a una fiesta, lo que le da un motivo para el viaje más “lógico” que visitar a una abuela que vive sola en medio de un lugar peligroso;
-y unas migas de pan, que supondrán ese material de intercambio con un posible donante que se encontrara.


Sin embargo, tanta lógica y tanta sensatez no desmontan lo mágico de la historia, sino que le da una gran comodidad y modernidad para ser contada, y así comienza internándose en un bosque con árboles que la miran entre aburridos, despreocupados, sonrientes,… lo propio de un bosque “wild” como dice el original y que podríamos traducir como salvaje pero también como loco, descabellado, extravagante o disparatado, que de todo tiene.


Y así empieza el desfile de personajes e ironías con quienes se encuentra: un lobo servicial, una ancianita generosa, un trol colaborador, una terrible bestia (jardinero y deprimido), un arpa que busca dueño responsable, tres osos muy enfadados, una Caperucita Roja envidiosa e irresponsable, una Pulgarcita muy atenta, un príncipe hecho polvo, una carroza que se estropea porque sus caballos se vuelven ratones (es de “segunda mano”), tres cerditos que analizan una casita de dulces, una bruja miope casi cegata, siete enanitos destinados a ser comidos, una docena de princesas y príncipes, las tres cabritas que el trol no dejaría pasar y una Rapunzel anfitriona de la fiesta. Todo un crossover*, una ensalada de cuentos de Rodari.


Y todos y todas juntitos en la fiesta pero… la Bestia sigue sola. Hasta que aparece Bella y se cumple la función de la bolsa de migas de pan y el encargo a los pájaros. Y para explicarlo, una suerte de flashback donde lo cuenta todo. Interesante para los pequeños ese volver atrás que probablemente sea la primera vez con que se lo encuentren. 


Y ya todo es baile y fiesta, hasta que  Capa de Lluvia Verde decide seguir viajando y ahí es donde podemos seguir la historia a nuestro antojo con, por ejemplo, un títere de madera, un patito feo, una oca con huevos de oro, un príncipe sapo,…


El libro mantiene la exquisitez de los libros de Riddell, el virtuosismo del dibujo a plumilla y esta vez el color. De forma especial la tapa (o cubierta) aparece troquelada, así como la guarda permitiendo ver el dibujo de la protagonista en la portadilla interior.



Muchos toques de humor y complicidad con adultos que, de alguna forma, también pueden llegar a los pequeños. Eso sí, hay que tener en cuenta que para disfrutarlo del todo, hay que conocer los cuentos y los personajes: el prohibido el paso a las cabras junto al trol y el puente, es de un cuento menos conocido en nuestro folklore (aunque también está: “Las tres cabras y el ogro”). La carroza-calabaza llena de zapatos, el caballo que se convierte en ratón,…


Todo queda contenido en estas dos imágenes el encontrarnos con la protagonista y al despedirnos de ella, otro trabajo que merecerá algún que otro premio y, seguro, el disfrute de todos sus lectores.



*Un crossover (cruce, en inglés ) es la interrelación de historias o personajes de diferentes lugares.

Nota: ¿Podrían haber traducido "Little Green Rain Cape" (Capa de Lluvia) como Gabardinita Verde?


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